Nuevamente ha llegado en otro año más el conocido como “día de los enamorados” totalmente
inmerso dentro de ese régimen capitalista donde el dinero y el consumo
son los pilares fundamentales de la sociedad. Y al mismo tiempo que
sonaba el pistoletazo de salida (mejor sería decir en este caso los
dardos y flechas del niño alado) para que una multitud de seres humanos
se dispusiera a celebrar la fecha impuesta del amor a base de comprar
relojes, colonias, cadenitas de oro, pulseras u otros detallitos en los
centros comerciales y demostrar así sus sentimientos con un objeto, en
este humilde espacio decidíamos continuar apoyando la propuesta anual
del 14 de Febrero, reivindicando en este día al jefe de los rompecorazones, al rubio de Florida conocido como Tom Petty.
Corría el año 1976, el mundo musical estaba un poco hasta
las pelotitas de lo que se estaba cociendo y se vislumbraban ciertos
síntomas rupturistas que desembocarían por una parte en la explosión
colorista de la new wave y por otra en la agitadora manifestación del
punk.
En medio de todo ello un rubiete guaperas ataviado con cazadora de cuero
daba su primera muestra de talento. Es posible que esa prenda de piel y
su imagen física fueran precisamente las que le permitieron convivir
con cierto respeto entre las nuevas tendencias. Pero la oferta que
proponía Tom Petty tanto a nivel instrumental como con su
voz nasal de claras connotaciones dylanianas estaba más encauzada a
revitalizar y recuperar sonidos de los Byrds o de los Rolling Stones
principalmente.
Entre los cortes del primer disco se hallaban “Rockin’ around (with you)”, “Anything that’s rock ‘n’ roll”, “Strangered in the night”o “Fooled again (i don’t like it)” , más roncanroleros en onda stoniana que otra cosa,“The wild one, forever” o “Mystery man” donde imperaba la épica americana, la extravagante y moderna "Luna" que comulgaba más con los sonidos de la 'nueva ola', o esos blues básicos de “Hometown blues” o de la elegante“Breakdown” que sería el tema estrella de su primer single.
Pero por encima de todo en aquel primer álbum de TOM PETTY & THE HEARTBREAKERS destacaba la que es para el que suscribe su mejor canción, “American girl”,
un tema con clara afinidad a los Byrds y del que apuesto le habría
agradado componer al pájaro McGuinn. Además esta canción tiene a mi
juicio la admirable peculiaridad de que nunca cansa. Como colofón final a
este post quisiera destacar que hace 4 años más o menos quedé
prendado de las botas de piel de serpiente que calzaba una chica
americana según unos desconocidos pero soberbios pájaros valencianos
(véase pinchando aquí). Aquello me pareció un maravilloso homenaje al "American girl"
de Petty y fue en ese preciso instante cuando me percaté
definitivamente de su grandeza, la grandeza de una inmortal chica
americana adicta a lo independiente que vivía contracorriente. "Oh yeah, all right, take it easy baby, make it last all night, she was an american girl".
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